El 9 de octubre de 2024, la Autoridad General de Comercio Exterior de Arabia Saudita emitió el Anuncio No. AD-24-2, anunciando el inicio de una investigación antidumping sobre el dióxido de titanio (TiO2) originario de China, tras una solicitud de fabricantes sauditas. Yan Xun, analista de la industria del titanio en Titanos Group, cree que este evento tendrá los siguientes impactos en el mercado interno:

 

1. Siguiendo acciones similares de la Unión Económica Euroasiática, la UE, Brasil e India, Arabia Saudita se ha convertido en la quinta región o país en iniciar una investigación antidumping contra el dióxido de titanio chino. Esto puede sentar un precedente para otras regiones y países, lo que podría llevar a más investigaciones y formar un "cerco" alrededor de las exportaciones chinas de TiO2, creando presión exportadora a corto plazo.

 

2. Los clientes sauditas pueden adoptar un enfoque de espera y observación, sin saber si aumentar los pedidos o cambiar de productos, lo que lleva a un período de incertidumbre que podría agravar las presiones de exportación sobre el TiO2 chino.

 

3. Las medidas antidumping generalmente se dirigen a fabricantes nacionales específicos o a determinados grados de productos. Incluso con la imposición de aranceles, todavía existen oportunidades para otros fabricantes y comerciantes, lo que podría fomentar la diversificación en las exportaciones.

 

4. Basado en experiencias anteriores, los fabricantes con clientes sauditas pueden acumular preventivamente productos o acelerar los envíos a Arabia Saudita y regiones circundantes, lo que podría elevar los precios en estos mercados.

 

5.Investigaciones dirigidas de este tipo pueden alentar a los fabricantes y distribuidores nacionales a buscar estrategias de exportación más dispersas, diluyendo así el enfoque en países objetivo individuales y promoviendo el desarrollo del mercado de exportación a largo plazo.

 

6. Estas investigaciones tienen como objetivo proteger la capacidad de producción "obsoleta" en la región, que no se alinea con los principios de crecimiento del mercado. Esto puede dañar la competitividad internacional de los fabricantes locales a largo plazo.

 

7. Los aumentos de aranceles probablemente llevarán a precios más altos del TiO2, lo que incrementará los costos para los usuarios finales y reducirá los márgenes de ganancia, debilitando la competitividad global de productos finales como los recubrimientos.

 

8. Tanto los productores sauditas como los globales enfrentan desafíos de transformación. Los aranceles incrementados pueden interrumpir la cooperación sino-saudita en los campos de productos y tecnología, así como afectar las inversiones y los esfuerzos de integración.

 

9. La ventaja competitiva de China en el dióxido de titanio sigue siendo fuerte, como lo demuestran las medidas antidumping. Si bien puede haber presión a corto plazo, el vasto mercado exterior y la naturaleza esencial del TiO2 chino aseguran que siga siendo una opción principal para los consumidores globales.